Distintos vecinos y usuarios de la bahía de Portmany han mostrado a Salvem sa Badia de Portmany su preocupación acerca de que Evaristo S. C., más conocido como el pirata de Porroig, vuelva a instalarse en la zona, donde en el pasado ya protagonizó diversos episodios de amenazas, a consecuencia de la regularización de fondeos que se emprendió hace algunos años.
A principios de año, Salvem sa Badia de Portmany ya recibió la advertencia de algunos vecinos que le habían visto por los alrededores de sa Punta des Molí, estudiando esa zona, y se temían que planeara instalar allí un negocio similar de alquiler de boyas ilegales, tal y como viene haciendo desde hace años en Porroig. Asimismo, a finales de enero, la Asociación de Amarristas de la Bahía de Talamanca también mostró su inquietud por la presencia en la zona de al menos tres embarcaciones propiedad de Evaristo S. C., todas ellas de más de diez metros de eslora. Allí, sin embargo, el servicio de vigilancia e inspección implantado desde la pasada primavera ha impedido su instalación.
El viernes pasado este individuo volvió a aparecer por la bahía de Portmany con una llamativa lancha de color amarillo de grandes dimensiones, la ‘L-50’, colándose además en las instalaciones del Club Nàutic Sant Antoni, donde llegó incluso a amarrar en la dársena del varadero y hasta trató de llenar su depósito de agua, hurtándola de una manguera de esta instalación. Las cámaras de seguridad que hay en el recinto captaron la llegada del pirata y su marcha, tras ser expulsado, unos minutos más tarde, por el equipo de marinería del CNSA. La llegada al muelle del club ocurrió alrededor de las 16,45 horas.
Aunque este verano se le ha vuelto a ver por Porroig alquilando boyas, pese a las órdenes de alejamiento de este lugar dictadas contra él por la Justicia, cada vez se estrecha más el cerco. En Talamanca, pese a sus intentos, tampoco ha logrado establecerse y ahora hay inquietud por si vuelve a instalarse en alguna zona de la bahía, que este verano ha vuelto a registrar un caos y descontrol absoluto por los fondeos ilegales. Diversas compañías de chárter, la mayoría foráneas, aparecen los viernes y sábados, fondeando sobre posidonia en muchas ocasiones, tanto en el interior de la bahía como fuera del dique, frente a la costa de ses Variades.
Llama la atención que, en una operación conjunta del Ayuntamiento de Eivissa, el Govern balear y la Guardia Civil, tal y como se informó hace una semana, se hayan levantado 26 actas de inspección principalmente en la bahía de Talamanca, lo que ha provocado una clara reducción de la presencia de este tipo de chárter náutico ilegal en el municipio de Eivissa. Además, se ha anunciado que los inspectores seguirán operativos durante todo el mes de septiembre.
En Sant Antoni, por el contrario, no se ha ejercido esta presión y los ilegales utilizan no sólo la bahía para fondear, sino que también emplean los muelles destinados a las golondrinas turísticas para embarcar y desembarcar pasajeros y personal de limpieza, cargar víveres y sacar la basura, que en ocasiones ni siquiera depositan en los contenedores, sino que queda abandona cerca del muelle. Todo ello sin autorización alguna. La presión llega a tal extremo que barcos fondeados irregularmente, algunos de ellos sin folio y que llegan a permanecer en la bahía más de seis meses, bloquean en ocasiones el acceso al polígono de entrenamiento de piraguas, situado cerca de la playa de s’Arenal, y obligan a las barcas turísticas a ejecutar complicadas maniobras para acceder a los muelles.
El pirata de Porroig ya instaló diversos muertos con boyas en la bahía en el pasado. Cuando se inició la operación de limpieza del fondo impulsada por el Club Nàutic Sant Antoni y autorizada por el Govern balear, en el año 2015, que culminó con la retirada de 170 muertos de hormigón y 173 toneladas de residuos, Evaristo S. C. profirió diversas amenazas a varias personas relacionadas con estos trabajos. Es lo mismo que ocurrió en la primavera de 2022, en la bahía de Porroig, cuando el pirata arremetió contra diversos miembros de la plataforma ecologista Maltesa del Mar mientras exploraban los fondos, llegando a decirles que pasaría por encima de ellos con su barca.
Desde Salvem sa Badia no se encuentra una explicación lógica a la situación de desidia y dejadez que se está viviendo esta temporada en relación al fondeo ilegal y tampoco se comprende por qué lo que se consigue en un municipio como el de Eivissa, donde se ha incrementado notablemente el orden en la bahía de Talamanca, en Sant Antoni no se lleva a cabo. Dada la actual coyuntura, parece muy sencillo que el pirata de Porroig establezca un nuevo negocio de boyas ilegales, sin que nadie se lo impida.